La Buena Semilla: Sábado 3 Octubre
Sábado
3
Octubre
Tenemos lucha… contra principados… contra huestes espirituales de maldad en las regiones celestes.
Efesios 6:12
Resistid al diablo, y huirá de vosotros.
Santiago 4:7
El combate cristiano (5): un escudo eficaz

Entre las piezas que constituyen la armadura de Dios, el cristiano es invitado a tomar “sobre todo… el escudo de la fe, con que podáis apagar todos los dardos de fuego del maligno” (Efesios 6:16).

¿Cuáles son esos dardos? Son pensamientos que Satanás hace penetrar en nuestra mente, para llevarnos a dudar de Dios y de su Palabra.

Esos dardos son “de fuego”, lo cual hace que sean muy peligrosos. Un pequeño fuego, si lo dejamos propagar, puede provocar un gran incendio. Asimismo, si toleramos un pensamiento de duda, este nos lleva a otro, y puede conducirnos a un gran desconcierto. Necesitamos, pues, mucho ese escudo de la fe.

Tomar ese escudo significa creer a Dios sin reserva. Es responder firmemente, como Jesús cuando fue tentado por Satanás: “Vete, Satanás, porque escrito está” (Mateo 4:10). Es decir, como el apóstol Pablo en medio de la tempestad: “Yo confío en Dios” (Hechos 27:25).

Cristianos, a partir del momento en que un pensamiento de duda relacionado con la bondad de Dios, con su sabiduría, su justicia o su amor se presenta, rechacémoslo enérgicamente. Opongámonosle con el argumento de la fe: “Escrito está”.

No tratemos de discutir o refutar los argumentos de Satanás mediante nuestra propia sabiduría, pues el adversario es poderoso y la derrota segura. El escudo de la fe es la única arma eficaz contra los argumentos del diablo. Es un arma probada, segura, eficaz, infalible. Dios afirma que con ese escudo podremos “apagar todos los dardos de fuego del maligno”.

Amós 6-7 – Filemón – Salmo 109:20-31 – Proverbios 24:17-18